La diputada del PRO, Marilú Quiróz, se encuentra en el centro de la polémica tras organizar un evento en el Congreso de la Nación que ha sido calificado como promotor de pseudociencia y negacionismo sanitario. El evento, que contó con el aval de Martín Menem, generó una fuerte controversia y críticas por la difusión de datos falsos, teorías conspirativas y la realización de un cuestionable "experimento" con imanes.
Reunión en Defensa de la Vacunación como respuesta
En respuesta a la conferencia organizada por Quiróz, las Comisiones de Salud y Ciencia y Tecnología del Congreso se reunieron para defender la vacunación. El encuentro contó con la participación de diversos expositores, incluyendo al ministro de salud de la Provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, quien alertó sobre la crisis de la salud, la caída en los niveles de vacunación y la falta de vacunas, especialmente en niños menores de 5 años.
Voces a favor de la vacunación
Durante la reunión en defensa de la vacunación, Franco Capone, médico especialista en medicina general, resaltó la importancia del calendario de vacunación nacional, destacándolo como un modelo a nivel internacional. También se cuestionó la ausencia de Mario Lugones y Fernán Quirós, ministros de salud de la nación y de la ciudad respectivamente, y se planteó la necesidad de defender las vacunas como un bien social, criticando a las empresas que lucran con la salud.
Christian Castillo, diputado por el PTS - FIT-U, señaló la responsabilidad del gobierno nacional en el ajuste presupuestario en materia de salud y remarcó la contradicción entre el lucro y el rol de la salud como derecho social, enfatizando que el debate público y estadístico es la única forma de desmontar la información errónea promovida por los grupos antivacunas.
La controversia generada por la diputada Quiróz pone de manifiesto la importancia de promover la información basada en evidencia científica y de combatir la desinformación en temas de salud pública. El debate sobre la vacunación continúa siendo un tema central en la agenda pública, con fuertes divisiones entre quienes defienden su importancia y quienes promueven teorías conspirativas y datos falsos.