Wanda Nara, en un momento estelar de su carrera con el éxito de la nueva temporada de MasterChef Celebrity, se sinceró sobre varios aspectos de su vida en el programa 'Sería Increíble' de Olga. Desde su nueva relación con Martín Migueles hasta la conflictiva situación legal con Mauro Icardi y su renovado vínculo con Maxi López, Wanda no dejó tema sin tocar.
En un ambiente relajado, mientras compartía un desayuno, Wanda reflexionó sobre su forma de ser en las relaciones. "Tengo muchas cosas positivas, doy todo de mí. Me re comprometo, lo doy todo y cuando capaz me fallan un poquito, siento que no van a poder conseguir una mina como yo", comentó. Ante la pregunta directa de Nati Jota sobre si estaba de novia, Wanda respondió con un "Estoy muy bien. Estoy muy feliz. Estoy saliendo con alguien".
La razón detrás del misterio en redes sociales
Wanda explicó por qué ha optado por mantener su nueva relación fuera del foco de las redes sociales. "En mi realidad, que muestro todo, cuando no mostrás algo pareciera que estás ocultando, pero en realidad no es que estás ocultando, sino que estoy cuidando y se malinterpreta". También mencionó su decisión de no exponer tanto a sus hijos varones, ahora adolescentes, para respetar su privacidad y evitar malentendidos.
¿Y qué pasa con Mauro Icardi?
Aunque no se profundizó en los detalles del conflicto legal con Mauro Icardi, la pregunta sobre por qué el futbolista no le devuelve sus pertenencias de Turquía quedó en el aire, sugiriendo tensiones persistentes entre ambos. La frase "Quiere que volvamos a vivir allá" insinúa un deseo de Icardi de reconciliación, aunque Wanda parece enfocada en su presente y futuro.
Maxi López: Un nuevo capítulo
Wanda también habló sobre su relación con Maxi López, quien sorprendió al aceptar participar en MasterChef Celebrity, trabajando junto a la madre de sus hijos. Este gesto marca un punto de inflexión en su relación, después de años de conflictos, demostrando una madurez y voluntad de construir un vínculo más cordial por el bienestar de sus hijos.
La entrevista reveló a una Wanda Nara en control de su vida, disfrutando de su éxito profesional y personal, y navegando las complejidades de sus relaciones pasadas y presentes con transparencia y determinación.