Paro Nacional en Puerta: Gremios en Alerta por Cristina Kirchner
La tensión política en Argentina se intensifica ante la inminente resolución de la Corte Suprema sobre la situación judicial de la ex presidenta Cristina Kirchner. Varios gremios, incluyendo la UOM (metalúrgicos), SMATA (mecánicos) y ATE Capital (estatales porteños), han anunciado su disposición a convocar a un paro nacional si la Corte confirma la condena contra la actual presidenta del PJ.
Esta decisión se produce en un contexto de creciente preocupación dentro del kirchnerismo, que percibe la posibilidad de una proscripción judicial que impediría a Cristina Kirchner participar en las próximas elecciones. El Instituto Patria, centro de pensamiento cercano a la ex mandataria, convocó a una reunión de urgencia con diputados, senadores, organizaciones sociales y sindicales para coordinar una respuesta unificada.
La reunión, que originalmente iba a tener lugar en el Instituto Patria, fue trasladada a la sede del Partido Justicialista (PJ), donde se espera que Cristina Kirchner tome la palabra. El evento coincide con la conmemoración del 70 aniversario de los fusilamientos de José León Suárez, un evento que resuena fuertemente en la memoria peronista.
La CGT, la principal central obrera del país, aún no ha emitido una declaración oficial sobre la situación de Cristina Kirchner, aunque se sabe que la relación entre la central y la ex presidenta no atraviesa su mejor momento. Sin embargo, otros gremios se han manifestado abiertamente en su apoyo, como el sindicato de mecánicos (SMATA), cuyo secretario adjunto, Mario “Paco Manrique”, denunció una presunta persecución judicial contra la ex mandataria.
El impacto en la economía y la sociedad
Un paro nacional convocado en respuesta a una posible condena contra Cristina Kirchner podría tener un impacto significativo en la economía argentina, ya afectada por la inflación y la recesión. Sectores como la industria metalúrgica y la mecánica, ya golpeados por los recortes en el Estado y la apertura de importaciones, podrían verse aún más afectados por la paralización de la actividad productiva.
La situación también genera incertidumbre política, especialmente en un año electoral. La posibilidad de una proscripción judicial contra Cristina Kirchner podría polarizar aún más la sociedad y generar tensiones sociales.
La respuesta del kirchnerismo
Ante este escenario, el kirchnerismo se declara en “estado de alerta y movilización”. Se espera que la reunión en la sede del PJ sirva para definir una estrategia de defensa y movilización en caso de que la Corte Suprema confirme la condena contra Cristina Kirchner. La consigna principal es que “este no es un problema de Cristina, es un problema de la democracia”.
El futuro político de Cristina Kirchner y la estabilidad del país penden de una decisión judicial que podría cambiar el rumbo de la historia argentina.